Números
Lección 34 Capítulos 32 y 33
La última vez que nos reunimos vimos que Moisés y el concilio de liderato de Israel habían estado de acuerdo con el pedido de Rubén y Gad que a ellos se les permitiera poseer la tierra que Israel acababa de ganar de los Madianitas, la tierra de Moab. Esta tierra en el lado este del Rio Jordán, en lo que es ahora el Reino de Jordania, vendría a ser parte que le tocaría de tierra a Rubén y Gad.
NO hay evidencia que la guerra con Madian (la cual Dios le dijo a Moisés que procesara) debía de ser de alguna manera asociada con la ocupación de Moab. Más bien, la meta de Jehová era destruir aquellos quienes habían llevado a Israel (como una nación) al adulterio al persuadirlos a coquetear con las mujeres paganas y con los dioses paganos. Aun cuando no se trata del tema específicamente en Números, me parece a mí que lo que Israel debió de haber hecho fue sencillamente derrotar a los Madianitas y su aliado Moab, continuar hacia delante y dejar a la primera nación de Moab vacía, el instalarse allí no estaba en la agenda del Señor.
Moisés estaba bien incómodo con esta proposición y aun cuando Rubén y Gad estuvieron de acuerdo en enviar a sus mejores tropas a pelear al lado de las otras 10 tribus al comienzo de la conquista de Canaán, nosotros podemos detectar que no todo estaba bien. Lo que Rubén y Gad sugirieron NO caía dentro del Pacto de Abraham; la tierra que ellos querían NO estaba dentro de las fronteras de la tierra prometida a Abraham, Isaac, y Jacob. Y aun así nosotros no leemos del Señor diciéndoles a ellos, “no”. En esencia Rubén y Gad iban a vivir AFUERA del campamento de Israel, AFUERA de la Tierra Prometida, porque ellos vieron más beneficio en la abundancia de los agostaderos de Moab que viviendo en la provisión del Señor, Canaán.
Sería educativo preguntarnos primero, ¿PORQUÉ Rubén y Gad (de todas las 12 tribus) decidieron pedir este territorio en particular? Su razón inmediata fue que ellos poseían un rebaño y ganado grande y Moab era un agostadero casi perfecto. Pero si nosotros vamos a unos siglos atrás cuando Jacob estaba dando su bendición en su lecho de muerte a sus 12 hijos nosotros encontramos unas claves: y la misma comienza con el hecho que Rubén estaba esencialmente desheredado. Rubén, el primogénito de Jacob, no se le dió los derechos tradicionales de primogenitura, porque Rubén tuvo relaciones sexuales con una de las concubinas de su padre. Jacob expresó que Rubén era “como aguas inestables” por lo que nunca iba a sobresalir. Rubén tenía todos los atributos físicos y la inteligencia y ventaja de hacer bien; pero a él le faltaba moral y fuerza de carácter y con el tiempo nosotros vamos a ver que Rubén prefería el estilo de vida de los nómadas, de siempre estar moviéndose a un estilo de vida más sedentario y establecido.
Cuando recordamos la bendición de Jacob sobre sus hijos, aunque parezca tan inverosímil para nuestras mentes modernas, capta que cada bendición profética no era tanto para un hijo individual, también sobre los descendientes de ese hijo; la intención era más como un oráculo profético sobre los miles de miles que serían miembros de la tribu llamada bajo el nombre personal del hijo.
Jacob estaba pronunciando los destinos de las tribus que cada uno de sus hijos iba a engendrar; él estaba pronunciando las características que cada una de estas tribus iba a desarrollar, y esas características eran extensiones de las características ya desarrolladas y mostradas de sus hijos. Las características de Rubén de inestabilidad serían pasadas y realizadas dentro de su tribu con el pasar de los siglos, y esto fue lo que llevó a la tribu de Rubén a escoger imprudentemente el quedarse AFUERA de la Tierra Prometida, en favor de quedarse en Moab, una tierra que NO fue separada para el pueblo de Dios.
Con el tiempo Rubén llega a ser menos prominente en la historia de Israel. De hecho algunos historiadores bíblicos dicen que para el tiempo de Saúl, Rubén ya había sido asimilado a la tribu de Gad y había desaparecido. Otros escritos bíblicos no respaldan esta consecuencia tan severa para Rubén, pero más bien lo que nosotros si encontramos es que la tribu de Rubén tomó el estilo de vida de los Beduinos y deambulaban por las fronteras del desierto del Trans-Jordanía, moviéndose alrededor con sus rebaños y ganados. Técnicamente Rubén todavía tenía territorio y mantenían su identidad de tribu, pero prácticamente ellos no gobernaban su territorio ni creaban la infraestructura dentro de la misma, o la defendían con vigor por lo que su territorio llegó a estar más y más bajo la influencia de la tribu de Gad. Como Beduino, Rubén no tenía tanto interés en controlar el territorio.
Gad tenía un destino un poco diferente al de Rubén; Jacob le dió a Gad la bendición más corta y la misma era una bendición bien extraña. La bendición era: “A Gad salteadores lo asaltarán, mas él asaltará su retaguardia” suena un poco repetitiva, ¿verdad? Pero la palabra Gad está asociada con la raíz hebrea gedud (un nombre que quiere decir tropa) y el verbo asociado yeguden quiere decir “ataque”. Esta bendición de Jacob sobre Gad fue registrada como un juego de palabras; la misma tiene que ver con el futuro de Gad como fuerza militar y el hecho que ellos van a tener que defenderse de sus enemigos todos sus días debido a su localización. El pronunciamiento de Jacob sobre Gad es mejor traducido como: “Gad, una tropa lo va atacar, pero él (Gad) va atacar en sus retaguardia”. En otras palabras, Gad iba ser una tribu de guerreros y ellos iban a tener una actitud militarista. Ellos iban a tener una orientación militar debido a la necesidad. Los enemigos iban a constantemente acosar a Gad pero al final ellos iban a generalmente a ganar. Y ciertamente esta bendición de 500 años atrás se ha cumplido y Gad ha llegado a ser una tribu de guerreros tremendamente valientes y efectivos en el Desierto. Esta es una razón por la que Moisés insistió en tener soldados de la tribu de Gad acompañando a Israel a Canaán.
Además, Rubén y Gad (junto con Simeón) formaron una de las 4 divisiones de Israel; ellos acamparon juntos en el lado sur del Tabernáculo. Rubén y Simeón eran hermanos; su madre era Lea, la primera esposa de Jacob. Gad era el hijo de la sirvienta de Lea, Zilpa, por lo que existía una relación natural entre estos tres.
Ahora bajo la providencia divina del Señor, aunque nunca fue la intención que Rubén y Gad se establecieran donde lo hicieron, ellos proveyeron un medio de protección (como una barrera defensiva) para proteger los otros territorios de tribus (eso estaría localizado ADENTRO de la Tierra Prometida como se supone que fuera) de los muchos invasores del este. Rubén y Gad llevarían el embate de los muchos saqueadores que querían pasar por su territorio para llegar a las otras tribus de Israel.
El comienzo del verso 16 es importante, porque en español el tono de la conversación se pierde. La sección comienza, “….Entonces ellos se acercaron a él (o se ofrecieron), y le dijeron (a Moisés)….”la palabra en hebreo para acercarse u ofrecerse es va-yiggeshu; y la misma significa rogarle a alguien de una manera suave o íntima. En otras palabras los líderes Rubén y Gad NO estaban demandando que ellos estaban quedándose o rehusando el seguir hacia delante. Más bien ellos querían explicar su razonamiento en preferir el área de Moab como su hogar y luego hacer una oferta que satisfaciera a los otros y al Señor para mostrarles su continua intención de lealtad a Israel y a los Pactos de Abraham y Moisés.
Lo que ellos ofrecieron hacer fue que si eran permitidos establecerse en el Trans-Jordania, ellos iban a construir un lugar para los animales, y ellos iban a construir pueblos para sus familias. Aunque también ellos iban a proveer un gran contingente de tropas de milicia para ir hacia Canaán y pelear junto a las otras tribus de Israel. La palabra hebrea para esta clase especial de tropa siendo ofrecida es nechalats; literalmente quiere decir ser seleccionada o ser seleccionada especialmente. La idea es que estos son los guerreros más feroces, lo mejor de lo mejor. Además estas tropas de Rubén y Gad serían la vanguardia del ejército Israelita ya que pelearon y conquistaron todo el tiempo hasta Canaán.
El trato es que estos nechalats no iban a regresar a su territorio de tribu en el Trans-Jordania hasta que cada tribu Israelita tuviera posesión de su propia tierra en Canaán; ellos iban a permanecer y pelear con sus hermanos todo el tiempo que tomara. Además ellos no iban a pedir territorio adicional en el lado oeste del Jordán, en la Tierra Prometida. Ellos iban a estar satisfechos con vivir en el lado este del Jordán, porque esa fue su decisión.
Moisés (indudablemente con la aprobación del concilio de liderazgo) estuvo de acuerdo con esta propuesta.
Vamos a volver a leer una porción del Capítulo 32.
VOLVAMOS A LEER NÚMEROS CAPÍTULO 32:25 – hasta el final.
Por lo que nosotros vemos aquí que la ½ de la tribu Israelita más grande, Manasés, decidió que ellos TAMBIÉN querían quedarse en la región de Trans-Jordania (probablemente por las mismas razones que Rubén y Gad querían). Ahora aun cuando no se dice nada, esto debió de haber sido un asunto bien traumático y contencioso. Para que una tribu se dividiera de tal manera, tenía que haber un gran desacuerdo entre los clanes que la formaban, y esto era una situación bastante seria.
Esto también quería decir que dos hombres estaban compitiendo (para principe, nasi) para jefe de la tribu de Manasés e indudablemente esta división de la tribu con una parte viviendo en el lado este del Jordán y la otra parte viviendo en el oeste del Jordán era primordial para una resolución de paz del desacuerdo.
A nosotros no se nos dan detalles sobre como todo esto sucedió, pero desde este punto en adelante nosotros vamos a comenzar a escuchar que la Biblia habla de “las 2 1/2 tribus” que permanecieron en el lado este del Jordán; esto sencillamente quiere decir que dos tribus enteras (queriendo decir todos los clanes de Rubén y Gad) MÁS la 1/2 de la tribu de Manasés (alrededor de la 1/2 de los muchos clanes que formaban a Manasés) tomaron la decisión de establecerse en el Trans-Jordania. Los restantes clanes que formaban la otra mitad de la tribu de Manasés se fueron con las otras tribus de Israel para Canaán para conquistarla y establecerse.
Rubén se estableció directamente al este del Rio Jordán, mientras que Gad habitó un área al este del Rio Jordán y generalmente localizado entre el sur del Mar de Galilea y el lado norte del Mar Muerto. La 1/2 tribu de Manasés se estableció en la tierra que comienza en el sur del Mar de Galilea y se extiende al norte hasta el Mt. Hermon. Esto no sucedió todo inmediatamente; esto tomó unos cuantos años antes de que las fronteras se formaran, pero aun así la composición de cada territorio fluctuaba con el tiempo y circunstancias políticas.
Como era costumbre en esa era, estas 3 tribus Israelitas reconstruyeron algunas de las ciudades que ellos habían destruído en la batalla con Madián, cambiaron los nombres de las ciudades a nombres de ciudades hebreas, y se establecieron allí. Las razones para reconstruir una ciudad en vez de comenzar de la nada en algún otro lugar son muchas pero en general es que a) una ciudad estaba invariablemente localizada cerca de un buen recurso de agua, y el agua no era fácilmente disponible en todos lados; b) generalmente habían carreteras y caminos establecidos que llevaban a los pueblos y ciudades donde los comerciantes traían los bienes necesarios; y c) la razón más obvia era que los materiales de construcción de la ciudad previa estaban allí listos para volver a usar para construir la nueva ciudad. Y como la mayoría de la construcción era de piedra, generalmente esto era un asunto de solo poner las piedras nuevamente en un montículo.
Aquellos de ustedes que han ido a Israel conmigo han visto decenas de estos enormes montículos llamados Tels, esparcidos por toda la tierra. Estos Tels son los restos de ciudades de antigüedad que una vez existieron allí, pero que ahora estan cubiertos con muchos pies de tierra y escombros traídos por siglos de viento y lluvia. La cosa es que cada Tel es un sistema de capas; y se ve como un bizcocho de capas, cada capa representa una ciudad que una vez fue próspera pero que ahora está destruida. La capa encima representa la próxima ciudad, la cual fue construído directamente sobre la que fue destruida, usando mucho de los escombros y el material de construcción. A veces hay hasta 18 o 20 capas en un solo Tel; eso es, 18 0 20 ciudades, cada una construida sobre los restos de la anterior están presente. Yo no tengo duda alguna que las ciudades que el ejército de Israel destruyó en Moab ya había sido construido sobre las ruinas de ciudades aún más antiguas.
Y ahora Rubén, Gad, y Manasés sencillamente van a repetir el proceso, añadiendo otra capa a las muchas Tels. Y después de ellos otras civilizaciones harían lo mismo. Por lo tanto el identificar los nombres de estas ciudades que vemos en Números 32, es bastante diferente en nuestros tiempos porque los nombres solo existían hasta que la ciudad fuese destruida; la próxima ciudad construida sobre esa, generalmente se le daba un nombre nuevo (aunque en ocasiones era el MISMO nombre, solo que en un lenguaje diferente).
Vamos a movernos al Capítulo 33.
LEER NÚMEROS CAPITULO 33 completo
Lo que nosotros tenemos aquí es un breve diario de viaje de la jornada de los Israelitas a través del Desierto. Y nosotros podemos aprender varias cosas de la misma más allá de la ruta. Por ejemplo nosotros encontramos que aun cuando es dicho en pasajes anteriores que Israel salió de Egipto en la Pascua esto NO es técnicamente correcto. Ya que se nos dice que ellos salieron de Egipto en Nisan 15, el cual es el 1er día de la Fiesta de los Panes de Levadura (el día siguiente de la Pascua). Aunque como yo he explicado en lecciones anteriores, nosotros pronto vamos a ver que la Fiesta Bíblica de la Pascua y Matza llegaron a ser fusionadas de tal manera que las dos llegaron a ser celebradas como una y la celebración entera es llamada alternadamente Pascua o Matza. Permíteme volver a decir esto porque te puede ayudar a entender las dificultades que algunos maestros y pastores (y estudiantes de la biblia) tienen en relación al día en que Cristo fue crucificado.
La Pascua, por ordenanza de Dios Bíblica, era un festival de 1 día que debía ocurrir el 14 del mes Hebreo de Nisan. La Fiesta de los Panes Sin Levadura era un festival de 7 días que debía comenzar el día DESPUÉS de la Pascua, el 15 de Nisan. Por lo que la Pascua (1 día) y los Panes Sin Levadura (7 días), tomados como 8 días consecutivos de fiesta pero en realidad dos fiestas separadas que meramente corren consecutivamente.
Permítanme también señalar otro punto clave de información: la manera en que la Pascua original egipcia fue conducida y la manera en que la Pascua fue llevada a cabo después de salir de Egipto y en tiempos futuros era de alguna manera diferente. Ya que en Egipto aun cuando el cordero de la Pascua fue sacrificado y esparcido en los dinteles de las casas el 14 de Nisan, el cordero de la Pascua no se comió hasta unas cuantas horas más tarde, en la noche, la cual quiere decir que ahora era el comienzo del nuevo día, Nisan 15. Recuerda que la manera Bíblica de determinar el final de un día y el comienzo del nuevo día era la puesta del sol. Por lo que durante el día de Nisan 14 en Egipto, el cordero era sacrificado y el proceso de cocinar comienza; y luego en la noche (el cual es el próximo día) ellos se lo comían.
Lo otro que tenemos que entender es que mientras técnicamente Nisan 14 se llama la Pascua y fue en este día que el cordero fue sacrificado y preparado, el Señor no mató a los primogénitos egipcios hasta la media noche DESPUES que los hebreos habían comido el Cordero de la Pascua.
Por lo tanto como el día había cambiado en la puesta del sol (alrededor de las 7 pm) los primogénitos de los egipcios fueron matados en horas tempranas de Nisan 15, el cual a partir de ahí llegaría a ser el 1er día del Festival Bíblico de los Panes Sin Levadura (Matza). Luego la siguiente mañana mientras TODAVÍA era el 15 de Nisan, los hebreos se reunieron y salieron de Egipto. Esto es un poco diferente de lo que nosotros típicamente pensamos, pero así es como sucedió.
En mi enseñanza del libro de Éxodo yo enseñé esto en términos más sencillos, usando el vocabulario que la iglesia usa mayormente asociado con el Éxodo; que es, la manera común de hablar que la Pascua marcó el untar la sangre en los dinteles de las puertas, el comer el cordero, el asesinar a los primogénitos por mano del Señor, e Israel salir de Egipto. Ahora parte de la razón que la iglesia primero presentó la Pascua de Egipto de esta manera (aun cuando técnicamente está un poco equivocada) es probablemente por la confusión de los maestros gentiles (quienes particularmente no querían escuchar nada de lo que los rabinos judíos tenían que decir) quienes no entendían que a) había una pequeña diferencia en la Pascua de Egipto versus todas las otras Pascuas futuras, b) que el protocolo de la Pascua y la Fiesta de los Panes Sin Levadura de Éxodo, Levítico y hasta Números llegaron a ser modificados en Deuteronomio y luego fueron modificados aún más con el establecimiento de las Tradiciones, c) como resultado de “b” las definiciones Bíblicas técnicas de la Pascua versus la Fiesta de los días de Matza son una cosa, pero la manera común en que los judíos hablaban de ellas, y como los judíos las enumeraban y lo que ellos la llamaban era completamente otra cosa. Y d) eventualmente se levantaron diferentes Tradiciones de cómo hacer la Pascua y la Fiesta de Matza, y todas estaban ocurriendo simultáneamente. Generalmente hablando una Tradición era usada por los judíos que vivían en Judea, y otra por los judíos que vivían en Samaria (que se habían alejado del Templo de Jerusalén y habían construido uno propio), y otra para los judíos que vivían en Galilea porque ellos tenían que hacer una larga jornada para llegar al Templo en Jerusalén, y todavía otra para los judíos que vivían en la Diáspora (eso es, todos los judíos viviendo afuera de la Tierra Santa), para dar cuenta por vivir entre los paganos gentiles y en ocasiones las distancias imposibles de viaje necesarias para llegar al Templo en Jerusalén para las ceremonias.
Mi intención no es irme por la tangente, pero a veces nosotros vamos a discutir la Pascua según ocurrió en el tiempo en que Jesús fue crucificado y yo voy hacer lo mejor que pueda para explicar por qué hay tal desacuerdo en cual día Él murió, y hasta si la Cena del Señor fue la Cena de la Pascua o algo completamente diferente. Y junto con la realidad que el orden de las cosas que ocurrieron en la Pascua de Egipto (y en qué día) no fue seguido en las Pascuas subsiguientes, también habían varias Tradiciones compitiendo de CÓMO conducir la Pascua que existió en los días de Jesús, ADEMÁS el uso de la terminología judía común diaria que es usada en los recuentos de los Evangelios y NO el uso de la terminología técnica de rito de los días de Fiesta (según se encuentran en la Torá) que, cuando son tomados junto, nos lleva a un problema. En adición, los Evangelios sinópticos eran desde un punto de vista de los judíos de Galilea (con sus propias Tradiciones de Pascua), pero es generalmente acordado que el Apóstol Juan (quien escribió la epístola de Juan) había llegado a ser un judío de Judea después de comenzar la vida como un pescador de Galilea o estaba expresando la Tradición de Judea (con SUS propias Tradiciones de Pascua). Pero esa es una lección bastante compleja por lo que vamos a discutir eso en otra ocasión.
Por lo que el primer punto del diario de viaje de Números 33 es Ramesés (en la tierra de Gosén) en Egipto, y el día en que ellos salieron fue el día 15 del 1er mes del calendario hebreo de ritos (recuerda, que los hebreos usaban diferentes calendarios para varios propósitos), y este mes era llamado Nisan.
Se nos es dado solo otra fecha: la de la muerte de Aarón, el Sumo Sacerdote en el 1er día del 5to mes del año 40 en el Desierto, y esto sucedió en el Mt. Hor. Eso quiere decir que MUY poco tiempo pasó desde la fecha de la muerte de Aarón hasta que Israel marchó a Moab, luego el incidente de Balaam, luego la Guerra de Madián, (la cual probablemente duró unos cuantos días), y luego Moisés muere; probablemente un espacio de tiempo de 3 o 4 meses.
Y se nos dice que Moisés fue instruido a escribir su itinerario. ¿Ahora cuál era el propósito de hacer esto si la Torá ha sido escrita en su curso? Lo único que podemos hacer es especular porque no se nos dice. La realidad es que si nosotros vamos atrás y verificamos los nombres de los lugares que los Israelitas acamparon (los lugares con los que nos hemos topado hasta ahora), nosotros vamos a encontrar que esta lista de Números 33 no coincide. Nosotros vamos a ver algunos nombres que faltan, y otros añadidos.
Cuando nosotros los contamos, nosotros vamos a encontrar que 42 estaciones (lugares donde ellos pararon y una que otra cosa sucedió) son listadas en Números 33. Por lo que, algunos maestros han tratado de buscar significado en el número “42”. Yo no estoy convencido que haya ninguno. Si nosotros miramos más detalladamente vamos a poder encontrar otros usos al número 42 en la biblia (como el periodo de 7 años en los Tiempos Finales al que los cristianos llaman Tribulación siendo dividido en dos periodos de 42 meses). Aun hasta la versión de Mateo de la genealogia de Yeshua consiste en 42 generaciones. Pero, sería un poco de exageración encontrar un cordón común teológico que conecte todos estos diferentes usos del número “42”, y yo no lo veo. Tal vez en algún momento en el futuro el Señor abrirá mis ojos a algo que actualmente yo no veo en ese aspecto.
Al menos, la mayoría de los maestros y Rabinos están de acuerdo que lo que nosotros tenemos es una lista de estaciones en las que Israel pasó a través donde algo de significado sucedió. En total, esto es un recordatorio para futuros lectores de la ardua jornada de Israel, y como el Señor en varios puntos les instruyó, él castigó, proveyó para ellos, destruyó alguno de ellos, y salvó a la mayoría de ellos. Esto es un recordatorio de cuanto ellos tuvieron que superar para poder escapar del agarre de Egipto, y reclamar la tierra que el Señor había separado para ellos. Y, yo creo que ha alcanzado su propósito porque yo no puedo pensar de un evento más grande en la historia de Israel (un evento de inspiración a la naturaleza) que ha sido sellado en las mentes y en el alma de cada judío, que el del Éxodo de Egipto.
Ahora, solo hay unas cuantas de estas 42 localizaciones que son conocidas hasta cierto grado de certeza, hoy en día.
Como resultado hay muchos mapas con varias rutas del Éxodo indicado, y yo no creo que vale la pena tratar con las mismas porque como desperfecto estos mapas muestran a los Israelitas básicamente deambulando alrededor del Sinaí, con la localización tradicional de los cristianos del Mt. Sinaí hacia la parte sur de la Península del Sinaí como el foco de sus viajes. El hecho es que el Sinaí nunca pudo haber mantenido a un grupo de 3000 Israelitas, mucho menos 3 millones. Por lo que yo, no creo esto.
No hay ni una gota de evidencia arqueológica que apoye el Éxodo que sigue el itinerario tradicional. La postura sostenida por mucho tiempo, y la que tantos cristianos han tenido sobre este asunto de la ruta del Éxodo es la razón principal por la que tenemos tantos maestros seculares (y aún más maestros cristianos liberales) dudando si realmente hubo un Éxodo, porque ellos insisten en buscar artefactos del Éxodo en el lugar equivocado.
Yo estoy convencido que el verdadero Mt. Sinaí está en Arabia, en un área donde en un momento dado era dominada por Madián, porque allí es donde exactamente la Biblia dice que está. Y, también eminentes como Philo y Josephus dicen que la localización es en Arabia (y ellos deben de saber mejor que nosotros). Muchos artefactos han sido encontrados en el área antigua de Madián (en el sureste de la Península de Arabia) que va con la cultura hebrea y ese periodo de tiempo y las descripciones de la Biblia de las características geográficas del Mt. Sinaí. Y hay una gran cantidad de folklore local de Arabia que también apoya esto. Ningún folklore o tradición como tal existe para la Península de Sinaí.
Al llegar al verso 50, el registro del itinerario de Números 33 llega a su estación final: Abel-Sitim en las estepas de Moab. Y, es aquí donde el Señor Dios le da a Moisés las instrucciones generales de como los Israelitas debían conquistar a Canaán. En pocas palabras ellos deben sacar a todas las personas que vivían allí. Luego Israel debía destruir todos los ídolos y toda parafernalia de la adoración a ídolos. Donde fuera que hubiera un templo o un altar o un lugar alto construido a un dios alto, el mismo debía ser destruído.
Para ser claro: Canaán debe ser vaciado de su pueblo. El Señor no los quiere más allí. La detestable religión de los Cananeos debe ser derrocada y todo remanente del mismo debe ser eliminado. El Señor no ha ordenado genocidio; pero se entiende que aquellos que se resistan a la toma del poder de los Israelitas (soldados en batalla) o aquellos que rehúsen irse después que ganen la batalla deben ser asesinados. También inherente en la instrucción (un principio de Dios establecido hace tiempo) es que cualquiera que renuncie a sus dioses falsos y se una a Israel está bienvenido hacerlo.
Bajo ninguna circunstancia los Israelitas deben permitirle a ninguna persona extranjera o tribu que permaneciera como un pueblo separado, aparte de Israel, ni tampoco puede haber ningún otro dios, aparte de Jehová, adorado en la tierra de Canaán. Modificar las instrucciones de Dios porque parezca más misericordioso o justo o amoroso o tolerante a nuestra sensibilidades humanas y políticamente correctas es sencillamente rebelión. Y el resultado VA SER desatroso.
Luego, en el verso 54, se nos da instrucciones sobre la distribución de la tierra entre las tribus Israelitas. Pero, espera; ¿acaso el Señor ya no dió estas instrucciones? Sí y no. En Números capítulo 26, se habla de la distribución de la tierra en términos de tomar un censo de las tribus como un precursor para dividir la tierra de acuerdo al tamaño de cada tribu. Pero, eso fue cuando había que dividir la tierra entre las 12 tribus; ahora, solo hay 9 tribus más la 1/2 de la tribu de Manasés. Y esto, porque Rubén y Gad más la 1/2 de la tribu de Manasés recibieron permiso de establecerse en el lado este del Río Jordán, y al hacerlo ofrecieron entregar cualquier derecho al territorio adentro de la Tierra Prometida.
El capítulo 33 termina con una urgente advertencia (que de hecho no fue tomada en serio) de Dios para Israel que SÍ ellos no seguían Sus instrucciones, exactamente, sobre el método usado para tomar a Canaán, cosas malas le iban a seguir.
Permítanme citarles los últimos 2 versos del capítulo 33:
LBLA Números 33:55 ‘ 55 “Pero si no expulsáis[l] de delante de vosotros a los habitantes de la tierra, entonces sucederá que los que de ellos dejéis serán como aguijones en vuestros ojos y como espinas en vuestros costados, y os hostigarán en la tierra en que habitéis. 56 “Y sucederá que como pienso hacerles a ellos, os haré a vosotros.”
Israel NUNCA ha prestado caso a esta advertencia; Josué no lo hizo, David no lo hizo, ni tan siquiera el Israel moderno que ha regresado a su tierra después de 1900 años en exilio ha obedecido esta directiva divina. Todavía permiten a extranjeros, no unido con Israel, a residir allí. Permiten religiones paganas (particularmente Islam) existir junto con la adoración de Jehová, hasta le dan a sus enemigos posiciones en el cuerpo de gobierno, el Knesset.
La misma permite y promueve el ateísmo. La misma permite y promueve la homosexualidad. La misma permite y hasta defiende a los musulmanes controlando el area del Templo el lugar de la morada previa de Jehová. Pero, peor aún, hasta da porciones de la Tierra Prometida a sus enemigos por promesas no cumplidas de paz; la tierra que las Escrituras dicen que no tienen absolutamente ningún derecho de disponer de la mismas ya que no es de ellos….la misma le pertenece al Señor.
Hasta que Israel no pare estas prácticas, asegure la tierra como les fue instruido, regresen al Señor y se arrepientan, siempre van a ver guerras, terroristas, bombas suicidas, y algún grupo u otro que dedica sus vidas en hacerle la vida a Israel miserable. .
De hecho, nosotros aquí podemos mover nuestras cabezas estando de acuerdo con todo esto y pensar “cuan tonto Israel puede ser”. Porque la mayoría de los problemas en nuestras vidas individuales….como miembros del Reino de Dios, esa entidad a la que Pablo se refiere como el Israel de Dios o el Verdadero Israel….son porque NOSOTROS no aseguramos nuestra vida como es instruido, nosotros no obedecemos al Señor y nos arrepentimos, por lo que nuestras vidas son hechas miserables.
De hecho: la tierra que el Señor separó para Israel; la tierra que pronto iban a conquistar y poseer bajo el liderazgo de Josué es el Cisjordania.
¿Le suena familiar este nombre? Eso es correcto, la tierra que nuestra actual administración demanda que Israel entregue a sus enemigos, Cisjordania, la misma tierra que el Señor dijo que era para Israel y solo Israel. Los Israelitas han pagado un terrible precio por 3300 años de rehusar seguir las instrucciones explícitas del Señor en lo que respecta la tierra y a quien se le permite poseerla y vivirla. ¿Acaso crees que estas naciones, como América, quienes insisten que Israel continúe ignorando esas instrucciones van a ser perdonados de la ira de Dios? ¿Qué tal el 50% aproximado de la iglesia que insiste que Israel entregue su tierra, porque los judíos supuestamente ya no tienen derecho a la misma?
La semana que viene comenzaremos con el capítulo 34.